El presidente de La Caja de Canarias, Juan Manuel Suárez del Toro, denuncia la absoluta falta de información imperante en el consejo de administración de BFA (la amtriz de Bankia)
Durante su declaración como imputado en la Audiencia Nacional, el presidente de La Caja de Canarias y presidente de Cruz Roja Española aseguró que no se le comunicó el déficit de capital de Bankia hasta la reunión del consejo de administración de BFA del 28 de mayo, cuando el nuevo presidente del grupo, José Ignacio Goirigolzarri, anunció la petición de 19.000 millones de euros de ayuda pública.
Se sintió «defraudado» cuando conoció la existencia del agujero, que implicaba la reducción a un valor cero de la participación de La Caja de Canarias en BFA-Bankia, que tuvo que comunicar con «angustia» a la Asamblea General de la entidad
Además, según fuentes jurídicas, no fue hasta la reunión anterior, del 9 de mayo, cuando conoció que la auditora del grupo, Deloitte, había planteado objeciones a las cuentas de 2011.
En el caso de Bankia, esas cuentas, aprobadas en marzo, reflejaron un beneficio de 309 millones de euros, frente a las pérdidas de 2.979 millones que se arrojaron con la reformulación de mayo.
Según Suárez del Toro, su «misión era asistir a las reuniones del consejo» de BFA y a aprobar lo que allí se proponía gracias a la confianza que tenía depositada en los gestores y en que su criterio era el mejor que se podía adoptar.
La falta absoluta de información al consejo no sólo se habría producido bajo la presidencia de Rodrigo Rato sino también durante los primeros momentos de José Ignacio Goirigolzarri, ya que los consejeros de BFA no recibieron ningún informe técnico que explicara la necesidad de solicitar ayuda al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB).
Eso ha llevado a que la acusación que motivó la investigación de la Audiencia Nacional, el partido UPyD, representado por el letrado Andrés Herzog, criticara hoy a los miembros de los consejos de BFA y Bankia por ser una «mera comparsa».
Durante la declaración de Suárez del Toro, que se prolongó durante una hora y media y en la que sólo respondió a preguntas de la Fiscalía Anticorrupción y de su defensa, este ingeniero también rechazó haberse enriquecido durante su etapa como consejero de BFA, ya que los 163.000 euros que cobró en concepto de dietas se ingresaron en la entidad.
Suárez del Toro ha sido el primero de los 33 consejeros de Bankia y de su matriz BFA en declarar ante el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu, ya que el interrogatorio del secretario del consejo de administración de Bancaja, Ángel Villanueva Pareja, se ha aplazado a mañana.
Este martes también está previsto que comparezcan ante el juez dos de los consejeros que estaban en Bankia en representación del PP: el exsecretario general del PP en la Comunidad de Madrid Ricardo Romero de Tejada y la exasesora de Esperanza Aguirre Mercedes Rojo Izquierdo.
Además de los 33 consejeros imputados y de las testificales ya previstas, el juez Fernando Andreu ha aceptado llamar a declarar como testigos al gobernador del Banco de España, José María Linde, y al actual presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, aunque todavía no ha fijado la fecha de la comparecencia.
Linde y Goirigolzarri se syumarán así a los otros testigos pedidos por la acusación el 15 M, que son el exgobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, el expresidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Julio Segura, y el socio de Deloitte que firmó las cuentas de Bankia, Francisco Celma.
La Audiencia Nacional empezó a investigar el caso Bankia el pasado 4 de julio al admitir a trámite la querella presentada la cual sostiene que, con la salida a Bolsa, los administradores cometieron delitos de estafa, administración desleal, apropiación indebida, falsificación de cuentas y maquinación para alterar el precio de las cosas.