Más de un centenar de estudiantes ha tomado y paralizado este jueves el acto de apertura oficial del nuevo curso académico en el Paraninfo de la Universitat Politècnica de València (UPV), que se ha suspendido por primera vez en la historia del centro.
El acto estaba previsto a las 12.00 horas, pero minutos antes una multitud de estudiantes ha entrado al recinto forzando la puerta del Rectorado y gritando consignas contra la corrupción y la Iglesia, en presencia del arzobispo de Valencia, Carlos Osoro. «Somos estudiantes, no monaguillos», han gritado.
El grupo ha subido a la tarima donde ha instalado un cartel en el que se podía leer ‘Universitat neoliberal fracàs social’ y se ha advertido al público de que el acto «no se iba a celebrar». Una alumna ha leído un manifiesto en el que reclaman el pago de la deuda histórica de la Generalitat a las universidades y una enseñanza pública y de calidad para todos los jóvenes.
Han revindicado que el curso no podía empezar hasta que los alumnos desfavorecidos tuvieran beca y han exigido que el rector de la Universitat, Francisco Mora, cumpla su programa. Estaba presente el director general de Universidad, José Miguel Saval.
Durante la protesta se ha pedido la salida de los bancos del campus y han reclamado que ningún estudiante deje de estudiar por el impagos de las tasas.
Algunos asistentes han abandonado el recinto tras los incidentes, entre ellos el arzobispo, otros se han quedado a escuchar a los estudiantes, que han revindicado una mayor representación estudiantil asegurando que este año el objetivo es la insumisión de los estudiantes ante el neoliberalismo y elitismo en la Universidad.
El Rectorado ha ofrecido celebrar una reunión este viernes con los representantes de los estudiantes pero su propuesta ha sido rechazada. El acto ha sido definitivamente suspendido una hora después del inicio previsto. Nunca antes había ocurrido en la apertura de curso de la UPV.