El titular de que Ciudadanos desbloqueaba la rebaja de la represión en la Ley Mordaza del Partido Popular ha durado bien poco y la formación de Albert Rivera corre ahora el riesgo de acabar siendo más papista que el Papa. Entre las 120 enmiendas que han presentado contra las iniciativas del PSOE para derogar, y del PNV para modificar, la Ley de Seguridad Ciudadana, ha incluido una para que la Policía pueda entrar en un domicilio ocupado sin tener orden judicial.
La medida ha provocado polémica y críticas por recordar a la conocida como Ley Corcuera -por el apellido del ministro socialista bajo cuyo mandato se aprobó en 1992, José Luis Corcuera- o también llamada Ley de patada en la puerta, por el artículo que establecía más o menos lo que ahora propone el partido de Albert Rivera.
El Tribunal Constitucional, en virtud del artículo 18 de la Constitución que dice que “el domicilio es inviolable”, declaró el artículo en cuestión que señalaba lo siguiente: “Será causa legítima para la entrada y registro en domicilio por delito flagrante el conocimiento fundado por parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad que les lleve a la constancia de que se está cometiendo o se acaba de cometer alguno de los delitos que, en materia de drogas tóxicas, estupefacientes o sustancias psicotrópicas, castiga el Código Penal”.
La propuesta de Ciudadanos va orientada a pisos y locales que hayan sido ocupados y en los que se crea que se están cometiendo delitos pero perfectamente podría ir destinado a personas que no hayan
El poder judicial le sobra a C's cuando se trata de proteger a los especuladores y castigar a las personas más vulnerables.
La #LeyMordazaNaranja pone en serio peligro jurídico tanto a la ciudadanía como a la propia policía. pic.twitter.com/SjShqRSbYn
— Albertix (@alber_tic) 1 de marzo de 2018